Si estos productos son bien empleados y acompañados por la bolsa de cultivo EASY-FILL™, se podría mejorar el volumen de producción, pero sobre todo la calidad de los frutos obtenidos.
Alcanzar grandes volúmenes de producción, obtener las horas frío necesarias para las frutas y generar una buena cuaja son parte de los objetivos de cualquier productor frutícola.
Sin embargo, la variabilidad climática presente en Chile (ver imagen) es una piedra de tope importante para alcanzar tal objetivo. Esto, porque no todos los productores podrán obtener los mismos resultados.
Imagen: Mientras el norte se enfría, la zona central se seca y la del sur ha comenzado a templarse. Fuente: Blog oficial de la Dirección Meteorológica de Chile - https://blog.meteochile.gob.cl/2021/04/07/la-nueva-normalidad-que-nos-dice-el-nuevo-periodo-climatico-sobre-el-clima-de-chile/
Lo anterior se debe a que, por ejemplo, los productores de la zona norte trabajan con un clima más árido (que está tendiendo a enfriarse), los de la zona central cuentan cada vez con menos agua y están más estresados hídricamente, mientras que la zona austral suele convivir con bajas temperaturas y heladas.
En la búsqueda por alcanzar productividades más homogéneas, independiente de las variables climáticas, se han desarrollado una serie de productos conocidos por el nombre de Reguladores de Crecimiento, los que además de ayudar a la obtención de fruta de mejor calidad y más homogénea, genera las condiciones para que la planta sea capaz de aumentar su rendimiento productivo.
A pesar de dicha descripción, su uso no es milagroso. Para lograr el efecto deseado se necesitará un buen riego, fertilización óptima, formar bien la estructura del árbol y emplear la bolsa de cultivo EASY-FILL™.
De hecho, la bolsa de cultivo EASY-FILL™ será de gran apoyo ya que esta permitirá reducir las condiciones de estrés que pueda sufrir el árbol frutal, más aún si este se encuentra bajo cobertura (techo, invernadero, malla, entre otros).
A esto se suma que la bolsa de cultivo EASY-FILL™ permitirá que los volúmenes de plantas por hectárea sean más manejables para el productor, ya que las bolsas se podrán ordenar y transportar con mayor facilidad, además de simplificar la ejecución de diversas labores como lo es la aplicación de los reguladores de crecimiento.
¿Cuáles son los reguladores de crecimiento?
Tal como menciona Red Agrícola (https://www.redagricola.com/cl/fitohormonas-reguladores-de-crecimiento-y-bioestimulantes/), los reguladores de crecimiento son compuestos que la planta produce internamente, pueden ser sintetizados por esta u obtenidos desde otros organismos.
Tales compuestos han sido mejorados y potenciados a lo largo de muchos años, lo que en la actualidad permite aplicarlos a la planta, entregando resultados mucho más potentes que si fueran naturales.
A fin de cuentas, estos son productos capaces de promover o inhibir la formación de determinados órganos al interior del árbol frutal, afectando su desarrollo y el ciclo de diversos procesos fisiológicos como maduración, horas frío, cuaja, germinación, entre otros.
Antes de utilizarlos, es fundamental que el productor consulte a un asesor, debido a que estos elementos deben ser aplicados en determinadas temporadas, se debe tener cuidado con la dosis a entregar, la variedad y especie sobre la que se trabaja e incluso la condición fitosanitaria del cultivo.
Si estas advertencias no son tomadas en cuenta, la aplicación de los reguladores podría tener un efecto contrario al deseado.
De forma general, los principales reguladores de crecimiento son:
Citoquininas y auxinas:
Mientras la citoquinina estimula la división celular, las auxinas hacen lo propio con la elongación celular. Estas, en su conjunto, dan como resultado mayores calibres, es decir, frutos más grandes.
Por ello, lo mejor es aplicar ambos elementos en conjunto. Las dosis y fechas de aplicación deben ser determinadas con la ayuda de un asesor.
Cianamida hidrogenada:
Este permite compensar el frío. En esos casos, se aplica cianamida hidrogenada. Esto ayuda a complementar hasta un 70% del frío requerido por la planta.
Ácido giberélico:
Este regulador se emplea cuando la fruta comienza a cambiar de color verde a amarillo —generalmente, 3 semanas antes de la cosecha, dependiendo de la especie y variedad—.
Al aplicarlo, la fruta ganará tamaño y firmeza, impulsada porque aumentará el volumen de la fruta.
La dosis y fecha de aplicación debe definirse con la ayuda de un especialista.
Eso sí, no es recomendable utilizarlo si hay posibilidades de que llueva en los días cercanos tras su aplicación, porque puede favorecer que el fruto sufra partiduras en la fruta.
Ethephon:
Ayuda a mejorar el color de la fruta. Sin embargo, es clave la ayuda de un asesor para su aplicación, debido a que su acción puede perjudicar la calidad de la fruta porque uno de sus efectos secundarios es la aceleración del proceso de maduración.
Dicho sea de paso, este regulador también favorece la aceleración de la caída de las hojas en otoño, lo que ayuda a que la planta pueda acumular frío invernal de mejor forma.
ReTain (AVG):
Este regulador, que también es llamado aminoetoxivinilglicina (AVG), retarda el envejecimiento. Esto, en la práctica, alarga la vida de la flor y genera que esta caiga más tarde, favoreciendo la cuaja.
Al alargar la cuaja, la probabilidad de que la flor sea polinizada y genere fruta, es mucho más alta.
De hecho, si una flor suele tener una vida de 24 horas, ReTain puede alargarla hasta las 30 e incluso más.
Los reguladores no son milagrosos
Hacer todas estas tareas de forma adecuada, con ayuda de la bolsa de cultivo EASY-FILL™, permitirá producir fruta de tamaño, firmeza, color y materia seca competitivos y de calidad exportable, mejorando las perspectivas y posibilidades tanto para el productor como para el viverista que comercialice los árboles frutales.
Sin embargo, los reguladores de crecimiento no son milagrosos y es necesario tener en consideración otros manejos y elementos como el ingreso de luz, temperatura, agua y nutrición.
Por lo mismo, será fundamental mejorar la distribución de luz dentro del huerto para potenciar la fotosíntesis.
Si estos dos elementos —luz y agua— no se balancean de forma correcta, se puede generar un estrés que impacte a la planta y disminuya sus defensas, por lo que estaría más propensa al ataque de plagas y enfermedades.
Si eres Agricultor y quieres empezar a cultivar podemos asesorarte y ayudarte con tu primer Test de Producción.
Por favor, escríbenos un correo electrónico a info@growinbag.cl